martes, 14 de octubre de 2008

Mariposas contra huracanes

martes, 14 de octubre de 2008
Siempre igual, siempre hay algo que provoca el cambio, y algo que lo sufre. Sangre corriendo de un lado para otro, miles de impulsos neurológicos, nombres abstractos para todos ello, pequeños orígenes escritos en ese laberíntico código genético y todo dependiente del azar. No queda otra opción que el caos, nuestra suerte y nuestra desgracia.




Dice la teoría del efecto mariposa que un pequeño cambio en las condiciones iniciales puede conllevar resultados muy diferentes. Es entonces esta teoría la que hace nuestra vida interesante? O es tan sólo una perversión de la naturaleza para convertirnos en ignorantes que intentan atrapar el agua entre los puños?

De cualquier manera estamos rodeados por sistemas matemáticamente caóticos, ligados de una manera tan fuerte a factores diminutos que convierten nuestra vida en algo imprevisible. Desde la meteorología hasta el comportamiento humano. Sabes aproximadamente de que dependen, pero no puedes predecir cómo evolucionarán. Quizá sea por eso que es tan fácil volverse loco, nos pasamos la vida buscando el equilibrio mientras el universo apenas puede mantenerse en pie. Es posible que enconces lo mejor sea dejarse llevar por aleteos o huracanes, volvernos ligeros y no buscar un lugar donde apoyar los pies. Quizá esa sea la única esperanza que le queda a la cordura.
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5 comentarios:

Anónimo dijo...

estoy contigo: la llave de la libertad es ir con el viento, creer en el viento y ceder

Irene dijo...

bien! otro blog interesante que leer! o por lo menos eso parece a primera vista :P. si algún día te aburres puedes volver a explicarme, esta vez por escrito, lo de los sueños y de qué se componen los sentimientos/pensamientos humanos... un besito guapa!
pd. me ha parecido ver una falta de ortografía, pero no voy a decir cuál es, a ver si jorge lo averigua, aunque creo que si lo vuelves a leer la encontrarás ;)

Adolfo Ramírez dijo...

La teoría del caos !

Siempre supe que eres muy inteligente, y que tienes una forma de hablar bastante diferente pero impresionante al final. Siempre supe que tus palabras eran sublimes, correctas, firmes, caóticas para mi poca cultura; siempre te supe así de inexoraable.

Ahora te leo, y te imagino platicándomelo de cerquita, con una taza de café de por medio.

Bah ! Qué importa, todo lo que diga siempre se quedará muy lejos de lo sorprendente que eres. Ya verás que tendrás muchos adictos a este blog; por favor, cuéntame entre uno de ellos y si tienes chance, acuérdate de mí un ratito.

Saludos mi eurpoea favorita xD

Iorgeus dijo...

Creo que lo sé!!!
Donde pone: Quizá esa sea la única esperanza que le queda a la cordura.

Debería poner: Quizá esa sea LE única esperanza que LA queda a LO cordura.

Rebeca dijo...

Has llegado tarde, ya la había corregido, pero era una mísera tilde.